¿Cuánto cuesta el servicio de residencia canina o hotel para perros en Barcelona?

Antes de adquirir un perro, hay una serie de consideraciones previas que deben plantearse: Además de la alimentación, del desembolso veterinario para la asistencia de su salud, de peluquería para su higiene y acicalado, del material que su atención requiere (camita, correa y collar o arnés, juguetes…), es necesario también prever que, a veces por trabajo y a veces por ocio, necesitaremos buscar a alguien que esporádicamente se haga cargo de nuestra mascota durante unos días. Quizá no siempre haya un familiar que disponga del tiempo que debería dedicarle al can, o simplemente, que esté dispuesto a asumir tanta responsabilidad.

Dejar el perro en manos de terceros es siempre un asunto delicado. Un animal es un miembro más de la familia, y por lo tanto, su atención y cuidados requieren esmero, incluso en nuestras ausencias. Es por tanto una tarea trascendental elegir una residencia canina profesional en la que podamos confiar para poder marchar con la total tranquilidad de que a nuestro regreso encontraremos feliz y contento a nuestro compañero de cuatro patas, sabiendo que ha comido bien, se le ha mantenido limpio y en las condiciones de higiene necesarias, y además ha disfrutado jugando y haciendo ejercicio.

¿Qué incluye el precio del servicio de hotel para perros?

Hay que tener presente que cuando dejamos un perro en una residencia canina en la ciudad de Barcelona pagaremos proporcionalmente:

  • El coste de la amortización de las instalaciones y del cuidado de las mismas (alquiler o precio de compra de terrenos, coste de las casetas para los animales y su conservación, jardinería, suministros de agua, luz y calefacción…)
  • La Seguridad Social y el salario del/los cuidadores (que lógicamente estará basado en la formación recibida, sus conocimientos y su experiencia).
  • Los costes administrativos del negocio (teléfono, publicidad, secretaría…).
  • Los costes burocráticos: el proyecto técnico inicial, la licencia de actividades, el registro de Núcleo Zoológico, las visitas técnicas urbanísticas y de Sanidad, las licencias de manejo de animales peligrosos entre otros.
  • Los impuestos: además del IVA e impuestos de la actividad, habrá que tener en cuenta el IBI y la gestión de residuos.
  • Los seguros de responsabilidad civil y de salud, tanto para los animales como para los cuidadores, o quienes puedan estar de visita en la residencia canina.

La oferta en precios de este servicio es dispar y sabemos que hay diferencias considerables en los diferentes centros. Por este motivo, como residencia canina reconocida oficialmente, consideramos importante tener toda la información, saber qué pagamos y porqué.

En el caso de Cataluña, las instalaciones de una residencia canina reconocida han de estar inscritas en el Registro de Núcleos Zoológicos de la Generalitat. La pertenencia a este Registro redunda en las garantías para el cliente.

Para obtener esta licencia y que se facilite esta inscripción en el registro, las instalaciones son inspeccionadas, confirmando que son adecuadas para albergar a los animales (perros en nuestro caso,) y tenerlos en las condiciones adecuadas y bien atendidos.

Es interesante conocer esta información para evitar caer en fraudes, llevándonos un disgusto al ir a recoger a nuestro querido canino, sin posibilidad de reclamar legalmente (aunque éste quizá pueda ser poco consuelo). Un servicio profesional tiene un porqué en sus precios. Cuesta normalmente más dinero que uno no legal, pero también ofrece mayores garantías.